Kinshasa, EFE Por lo menos 63 personas murieron al estrellase un avión en la ciudad congoleña de Goma, según la cifra provisional de víctimas dada a conocer por fuentes de la terminal aérea.
Las fuentes dijeron que la aeronave llevaba a bordo 79 personas, entre pasajeros y tripulantes, y que cinco tripulantes y 11 pasajeros lograron sobrevivir.
Es posible que haya más víctimas porque el avión cayó en una zona populosa de la ciudad de Goma, en el extremo oriental de la República Democrática del Congo, cerca de la frontera con Ruanda.
El aparato, al parecer un DC-9, pertenecía a la compañía privada Hewa Bora y tenía como destino la ciudad sureña de Kisangani.
Cayó sobre el barrio populoso de Birere, pegado a la terminal aérea de Goma.
Según dijeron testigos a la emisora local Radio Okapi, el piloto perdió el control de la aeronave cuando estaba despegando e intentó frenar, pero sobrepasó la pista de aterrizaje y cayó en el barrio de Birere.
Informes anteriores de la misma emisora, administrada por la misión de la ONU en la RDC, hablaban de que a bordo del aparato había 94 personas, entre pasajeros y tripulantes.
Es frecuente que haya diferencia de cifras en estos casos en la RDC porque no siempre se incluyen en el manifiesto de carga todas las personas que suben a los aviones de transporte que vuelan en este país.
El transporte de pasajeros en aviones de carga es muy frecuente en la RDC, uno de los países más extensos del continente. Aunque el territorio abarca 2,3 millones de kilómetros cuadrados, sólo hay 500 kilómetros de carreteras asfaltadas.
La RDC tiene uno de los peores registros de accidentes aéreos y algunas de sus compañías tienen prohibido aterrizar en aeropuertos europeos por las malas condiciones en las que vuelan sus aparatos.
En Kinshasa, la capital, tras conocerse detalles del accidente quedó suspendida la sesión de la Asamblea Nacional, y se constituyó una comisión para conocer las razones del accidente.
